El tiempo en Castro

miércoles, 19 de diciembre de 2012

La Plataforma para Salvar la Bahía celebra con entusiasmo la sentencia que reconoce el derecho a la consulta popular sobre el Puerto Deportivo



  ·         La sentencia del Tribunal Supremo abre la posibilidad de que los Ayuntamientos consulten sobre asuntos que son competencia de la comunidad autónoma.

·         La Plataforma no promoverá la consulta popular ya que  actualmente nadie se plantea construir el puerto deportivo.

La noticia llegaba en vísperas del 32º aniversario de la consulta popular de Castro Novo: el Tribunal Supremo anula el acuerdo del Consejo de Ministros que desestimó la petición de consulta popular del Ayuntamiento de Castro Urdiales. La sentencia supone el final de un largo camino iniciado por la Plataforma para Salvar la Bahía en defensa de la voluntad popular, cuyo itinerario ha sido el siguiente:
-        Tras un semestre de movilizaciones por parte de la Plataforma para Salvar la Bahía, el pleno del Ayuntamiento celebrado el 13 de julio de 2010 rechaza el proyecto de puerto deportivo con el voto en contra del PRC. Meses antes, en febrero de 2010, se aprobaba solicitar la celebración de la consulta popular, nuevamente con el voto en contra del PRC.
-        El 17 de septiembre de 2010 el Consejo de Ministros acuerda desestimar la petición de consulta popular.
-        El Ayuntamiento, con los votos en contra de PRC y PSOE, acuerda recurrir al TS la decisión del consejo de ministros, quien finalmente estima el recurso del Ayuntamiento y declara la nulidad del acuerdo del Consejo de Ministros. La consulta popular es legal.
A pesar de las reiteradas peticiones del Ayuntamiento al Gobierno de Cantabria para que aparcara el puerto deportivo y aprobara un Plan de Ordenación de la Bahía,  el anterior consejero del PRC, José Mª Mazón, insistió obstinadamente en mantener el proyecto y ningunear la voluntad popular expresada por el Ayuntamiento, alegando que la consulta popular sobre el puerto deportivo era ilegal porque no era de competencia municipal. El anterior Gobierno de Cantabria ha sido parte activa en el litigio ante el Tribunal Supremo, aportando informes y pruebas tratando de demostrar que el Puerto Deportivo no es asunto que pueda someterse a consulta al ser competencia del Gobierno de Cantabria. 
Sin embargo, la sentencia del Tribunal Supremo ha dejado en evidencia tanto al gobierno de la nación como al gobierno autonómico, despachando su estrecha interpretación de la autonomía local para aportar una visión cargada de inteligencia jurídica y de sentido común, y que se apoya en el hecho de que un alcalde pueda convocar a sus vecinos sobre las cuestiones importantes que afectan a la ciudad aunque no sean de su estricta competencia. Del conjunto de la sentencia vamos a destacar tan solo un pasaje que ayuda a entender su alcance jurídico:
“consideramos que el objeto de la consulta municipal promovida por el Ayuntamiento de Castro-Urdiales, en razón de la singularidad del emplazamiento elegido para ejecutar el puerto deportivo, en la bahía de la ciudad, que comporta remodelar la fachada marítimo-terrestre, y que forma parte del entramado urbano existente entre el Paseo Marítimo y el Malecón, y que puede calificarse funcionalmente de equipamiento local, atendiendo a las características que se revelan en el informe del Director de Puertos de Cantabria de 9 de febrero de 2012, incorporado al ramo de prueba de las presentes actuaciones, entendemos que quedan afectadas directamente competencias propias del municipio en materia de seguridad en lugares públicos y en materia de ordenación urbanística”

Además de las consecuencias jurídicas, debemos señalar que esta sentencia abre la posibilidad de que los alcaldes consulten a sus ciudadanos sobre materias que sean de competencia regional o estatal pero que puedan afectar a competencias locales. Es decir, la mayoría de los proyectos y planes regionales, incluidos los controvertidos PSIR'es  podrían ser objeto de consulta popular. Ahora solo falta que los propios alcaldes se animen a consultar a los ciudadanos, promoviendo una mayor participación ciudadana, algo que la sociedad demanda insistentemente.
Así pues, la Plataforma para Salvar la Bahía celebra con entusiasmo esta sentencia por cuanto tiene de profundización en la democracia local y el respeto de la voluntad popular, y felicita a los concejales de la anterior legislatura que mantuvieron la lucidez y la persistencia en ejercer el derecho a consulta, recurriendo al Supremo para obtener una sentencia que nos demuestra que de vez en cuando hay justicia en este país.

Castro Urdiales, a 19 de diciembre de 2012.

No hay comentarios:

Publicar un comentario